Paola Wlack Luz en tu Camino

SOSTENER SIEMPRE LA LUZ Y EL AMOR EN NUESTROS CORAZONES ES LO MEJOR QUE PODEMOS HACER

Queridos hermanos, hay eventos que se presentan frente a nuestros ojos, haciéndose prácticamente imposible ser indiferentes a ellos. Sin embrago, el mensaje que hoy mismo deseo transmitirles desde mi corazón es que ante el mismo evento mencionado, podemos vibrar en diferentes frecuencias. Vaya, el problema real no es el acontecimiento, sino la percepción que tenemos respecto a él. 

 

Allí, donde está la atención, está la realidad.  

 

 

Yo elijo ver la perfección desde el Verdadero Amor Compasivo y no desde el miedo.  RECONOZCO CON CERTEZA QUE NADA PUEDE SALIRSE DE LAS MANOS DE DIOS Y QUE TODO ES PERFECTO. Elijo no sentir lástima por mis hermanos, cuya alma ha elegido vivir eventos de dolor. Elijo reconocer Y HONRAR  su gran amor y su poder. Elijo tender mi mano a aquellos que elijan recibir mi ayuda, cualquiera que ésta sea. Elijo NO responsabilizar a nadie ajeno a mí, por aquello que veo ocurrir aparentemente afuera. Elijo No ver conspiraciones ocultas, y mucho menos sentir agresión por parte de mis hermanos conscientes o inconscientes. Sencillamente elijo, reconocer mi propia responsabilidad sin culparme, pues tengo la certeza de que el pasado sí se puede cambiar al vivir el presente en ABSOLUTO AMOR INCONDICIONAL. Por ello, nada pasado puede dañarme.

 

Hoy, nuestros hermanos en Japón viven el sufrimiento en carne propia y la mejor ayuda que podemos dar a ellos (entendiendo siempre que somos UNO con ellos) , es sostener la paz y el amor en nuestros corazones. Si sostenemos la paz, la serenidad, la luz, el amor, la calma, etc. en nuestro interior, en AUTOMÄTICO lo reciben en su interior.

 

Enviemos la ayuda material que sea necesaria a través de los medios apropiados, quizá no esté en nuestras manos hacer algo más en lo físico. Pero siempre, SIEMPRE,  podemos hacer TODO a través de la intención y del Espíritu. 

 

Que nuestras oraciones y meditaciones NO se enfoquen a minimizar la tragedia, sino a SOSTENER EL AMOR.  

Orar pidiendo luz para nuestros hermanos, solo refuerza la carencia de ella. NUNCA HAN PERDIDO LA LUZ, NUNCA NADIE PUEDE PERDERLA, si acaso, olvidarla.